¿Sabías que una temperatura interior en el coche de 35ºC podría afectar a tu tiempo de reacción? El aire acondicionado no solo es útil… sino también necesario. Sin embargo, son muchos los conductores que se equivocan a la hora de usarlo. ¿Quieres saber cuáles son los errores más comunes?
× Máxima potencia al arrancar
¿Eres de esas personas que conecta el aire acondicionado a tope nada más entrar en el coche? ¡Error! Lo conveniente es dejar que el sistema se active. En lugar de poner el dispositivo a máxima potencia, conviene que ventiles tu vehículo.
¿Qué hay que hacer? Cuando comiences a circular, baja las ventanillas para renovar el aire del interior. Una vez renovado, ya puedes encender el aire (cierra las ventanas cuando actives la climatización). Con este proceso de renovación estarás rebajando la temperatura interna de tu coche de forma natural.
× Difusores mal enfocados
Recuerda que los difusores pueden orientarse en direcciones distintas… a veces no es cuestión de potencia sino de orientación. Si quieres repartir el aire de la mejor forma posible, no dirijas el difusor a la zona de tu cara, sino hacia arriba.
¿Qué hay que hacer? Distribuye el aire por todo el vehículo enfocando los difusores hacia el techo. De esta manera, todos los pasajeros del coche se refrescarán.
× No activarlo cuando refresca
Ten en cuenta que, aunque la temperatura exterior sea “refrescante”, si no activas el aire acondicionado… ¡los cristales de tu vehículo terminarán empañándose!
¿Qué hay que hacer? Activa el aire acondicionado (aunque sea con la mínima potencia) para que la temperatura ambiente no termine cubriendo tus ventanas de vapor.
× Obviar el mantenimiento
¿Revisas el líquido de frenos? ¿Compruebas tus neumáticos? Toma nota: el aire acondicionado también necesita ser revisado cada cierto tiempo. Sin un mantenimiento específico, el dispositivo irá perdiendo potencia o caudal.
¿Qué hay que hacer? Es aconsejable un cambio de filtros cada 15.000 o 20.000 kilómetros. Si quieres que tu sistema de climatización siga funcionado, ten en mente las revisiones.
Siguiendo estos consejos sacarás el máximo partido a tu dispositivo de aire acondicionado. Y recuerda que, cada determinados kilómetros, conviene una revisión en el taller.